El aguaymanto nació en los andes peruanos y ha sido comida por los incas, convirtiéndose en una fruta altamente recomendable en la población de nuestro país. Sin embargo, no todos conocen sus beneficios los cuales van más allá de su buen sabor y sus propiedades para dar energía.
Es
una fruta redonda, amarilla, dulce y pequeña (entre 1,25 y 2 cm de diámetro),
originaria de América, donde se conocen más de 50 especies en estado silvestre.
Aunque se conoce desde épocas precolombinas y es un alimento silvestre
tradicional en zonas andinas, que alcanza hasta dos metros de altura, puede
llegar a generar 30 tallos huecos, sus hojas son acorazonadas y con
vellosidades; tiene una raíz principal, de la que salen raíces laterales, las
flores tienen cinco pétalos de color amarillo, el fruto es una baya globosa y
jugosa, con una pulpa agridulce dentro de la cual se encuentran gran número de
semillas; el fruto puede pesar de 4 a 10 gramos y permanece cubierto por el
cáliz o capacho, o durante todo su desarrollo.
Según
investigaciones por ser digestivo, ayuda a prevenir cáncer del estómago, colon
y del intestino. El fruto sirve para purificar la sangre, ayuda a eliminar la
albúmina de los riñones, reconstituye el nervio óptico, limpia las cataratas,
contribuye contra la diabetes, la artritis incipiente y alivia eficazmente las
afecciones de la garganta. Por su contenido de vitamina A se le considera un
fruto carotenógeno.
Ayuda a combatir las siguientes enfermedades:
·Amibiasis:
Controla la amibiasis.
·Antirreumático:
·Asma:
Combate el asma.
·Bronquios:
Alivia los problemas bronquiales.
·Calcio:
Ayuda con la formación de los dientes y los huesos.
·Cáncer
(Colon, Intestino, estomago): Previene la aparición del cáncer por sus
propiedades digestivas.
·Cansancio
mental: Combate el cansancio mental.
·Colesterol:
Disminuye los niveles del colesterol en la sangre.
·Depresión:
Combate la depresión.
·Diabetes:
Consumir el fruto del aguaymanto ya que tiene una sustancia similar a la
insulina.
·Envejecimiento:
El consumo de este previene el envejecimiento.
·Garganta:
Alivia los problemas de la garganta.
Heridas: Favorece la cicatrización de las heridas.